Gran espectación ante el X “match” de fútbol España – Italia

Alrededores de la taquilla del Athletic

Alrededores de la taquilla del Athletic Club con la famosa cola, durante el despacho de localidades. La causa; el reducido lote de entradas del campo de San Mamés. Una muchedumbre trefilada por la fuerza pública, ha demostrado su testarudez y su humorismo de Lotería de Nochebuena en las cercanías de la taquilla, ofreciendo un aire de final de copa.  Las 20.900 localidades de San Mamés han sido materialmente asaltadas. Sucede que el partido es muy interesante; pero sucede también que es mucho más interesante aún porque cada boleto se ha convertido en el documento más importante de la cartera de un elegido.

El partido disputado el 19 de Abril de 1931, en el estadio de San Mamés, concluyó con el empate a cero goles entre las selecciones de España e Italia.

La última alineación de la «squadra Azzurra» en su último partido jugado en Oporto.(Foto Tavares Fonseca)

01 de septiembre de 1939.- Inicio de la Segunda Guerra Mundial.

 

La guerra estalló en Europa en septiembre de 1939, como reacción ante un nuevo avance de Hitler que pretendía establecer el dominio alemán sobre el continente y, este mismo año en 23 de agosto de 1939 Hitler firmó un pacto con la URSS,  quedando la Europa Oriental dividida en dos esferas de influencia, una alemana y otra soviética con Polonia repartida entre las dos. Ocho días más tarde los alemanes invadían Polonia y Gran Bretaña y Francia declaraban la guerra.

30 de enero de 1933. Hitler llega al poder.

A comienzos de la década de 1930, el clima en Alemania era lúgubre. La depresión económica mundial había golpeado duramente al país y había millones de desempleados. El recuerdo de la derrota  de Alemania  durante la Primera Guerra Mundial, estaba todavía fresco en la memoria colectiva, y los alemanes no confiaban en su  gobierno. Estas condiciones propiciaron el surgimiento de un nuevo líder, Adolf Hitler, y su partido, el Partido Nacionalsocialista Alemán de los Trabajadores, o partido nazi abreviadamente.

Hitler era un buen orador, potente y cautivador, que atraía a un gran número de alemanes desesperados por mejorar la situación del país.

Una marcha en apoyo al movimiento nazi durante una campaña electoral de 1932. Berlín, Alemania, 11 de marzo de 1932

Antes de  la depresión económica , los nazis eran prácticamente desconocidos, habían ganado aproximadamente el 3 por ciento de los votos para el parlamento alemán en las elecciones de 1924. En las elecciones de 1932, sin embargo, los nazis ganaron el 33 por ciento de los votos, más que cualquier otro partido. El ascenso al poder del partido fue rápido; el 30 de  enero de 1933, Hitler fue nombrado canciller, jefe del gobierno alemán, y muchos alemanes creyeron que habían encontrado al salvador de la nación.

Hitler saluda desde el balcón a una multitud que le aclama